¿Conoces las situaciones que están llevando a tu equipo a una vida útil corta? ¿Cuántos años de uso de equipo estarás perdiendo? Con estos tips podrás prevenir que esto te suceda.
- Cuando un equipo muestra una alarma, esta no se debe deshabilitar con el pensamiento que siempre está sonando y que debe ser algo habitual para la máquina. Muchas veces el personal de mantenimiento interno en tu compañía no conoce a fondo las estructuras de diseño del equipo y por solventar un problema agobiante como el ruido persistente de la alarma, causan un problema adicional. El no resolver el problema del cual la alarma está advirtiendo es el primer error, y además remover la alarma causará una grave falla en el sistema.
- ¿Has escuchado que aveces se remueven sistemas de seguridad secundarios para reducir los costos iniciales del equipo? Algunos proveedores lo hacen. Esta práctica podría causar más daño a tu equipo en caso de una emergencia, por el simple hecho de ahorrar unos dólares del presupuesto inicial. Los sistemas de alarmas secundarios, están diseñados para activarse en caso que el sistema primario de alarma falle. Es un acontecimiento escaso en la práctica, pero si llegase a pasar podrías poner en peligro la vida de tu paciente y dañar el equipo más allá de su posible reparación.
- El personal de mantenimiento interno de las empresas suele no estar calificado para darle servicio a los equipos, ya que estos cuentan con mapas de diseño patentados y propios a la empresa de manufactura, por lo que el equipo a cargo necesita un entrenamiento especial. Por ello, la importancia de contratar este servicio a empresas con personal certificado y con procesos de calidad como PROMED, que garantizan los buenos resultados a largo plazo.
- La misma falta de información acerca de los equipos por parte de personas no certificadas, ocasiona que se tomen decisiones como la búsqueda de partes de repuestos genéricos que son más baratos, viéndose afectado el equipo a mayor escala por el detrimento de las parte no certificadas ni calibradas.
- Los equipos médicos están calibrados para operar a temperaturas bajas. Sus motores y sensores funcionan mejor si se evita que se calienten. La temperatura a la que mantienes tus equipos juega un papel muy importante en prolongar su vida útil. Una de las prácticas más comunes que se realiza por error, es apagar los sistemas de aire acondicionado y ventilación cuando el laboratorio está cerrado. Inevitablemente la temperatura ambiente sube, especialmente en países tropicales, y el equipo puede fallar antes de tiempo por esta razón.
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